El ananás fue descubierto en 1493 durante el segundo viaje de Cristóbal Colón al Nuevo Mundo. Parece tener su origen en el alto valle del Orinoco en Brasil. La planta de la piña es una planta perenne con una roseta de hojas puntiagudas de hasta 90 cm de longitud. Del centro de la roseta surge un vástago en cuyo extremo se producen las flores, que darán lugar a la infrutescencia fruta multiple.
Esta fruta tropical, además de deliciosa y apetecible en cualquier época del año, es tremendamente beneficiosa para nuestro organismo, no sólo por su composición nutricional, sino también por sus propiedades. Vamos a conocer qué características de la piña la convierten en un alimento tan especial. ¡Posiblemente te animarás a incrementar su consumo!
En fitoterapia se utiliza el tallo donde se concentran todas sus propiedades medicinales. El tallo de la piña contiene grandes cantidades de una enzima proteolítica, la bromelína, que presenta cualidades muy interesantes, estimula las secreciones del páncreas y los jugos gástricos, lo que deshace las proteínas liberando los aminoácidos que las forman mejorando considerablemente el proceso de digestión. Para aprovechar al máximo este efecto se recomienda, consumir antes de las comidas, para estimular los jugos gástricos y preparar el estómago a la ingesta de alimentos. Ésta es capaz de fraccionar las macroproteínas, acelerando así su digestión y facilitando su eliminación. Es un arma especialmente eficaz para combatir el peso excesivo asociado a la retención de agua o en el caso de un estado celulítico. Al fragmentar las proteínas y separar el tejido celulítico, favorece la desinfiltración, la movilización y la eliminación de los depósitos de grasa. Por otra parte y gracias a su acción antiinflamatoria, la bromelína se utiliza actualmente para reabsorber los edemas localizados asociados a depósitos de grasa, contusiones, fracturas, torceduras, luxaciones, esguinces, etc…, la bromelína evita el aumento de la insulina en la sangre provocado por la absorción de productos constituidos por azúcares rápidos (dulces, etc…) y por consiguiente su almacenamiento en forma de grasas.
La piña es una fuente rica en antioxidantes como la vitamina C la hacen poderosa para combatir los radicales libres presentes en el organismo, alto contenido de minerales como: yodo, fósforo, calcio, hierro, zinc, magnesio, manganeso, que, además de reforzar las defensas, también tienen una acción positiva en la tiroides y las células nerviosas. Es una fruta de propiedades diuréticas y deportivas por su alto nivel de potasio. Favorece la eliminación de liquido y toxinas del organismo. Además de los beneficios de la fruta, las hojas de la planta también se pueden utilizarse con propiedades medicinales.